Aprovecha al máximo los años universitarios

Todo el mundo sale de la universidad con un título. Si en tus entrevistas con empresas quieres destacarte del montón, tienes que salir de la universidad con algo más. Y no me refiero a más títulos.

Seguramente has visto alguna vez las típicas camisetas de playa con frases como “Mis padres se fueron a Punta Cana y lo único que me trajeron es esta puñetera camiseta” ¡Qué nadie diga que los padres no tienen sentido del humor! Pensé en estas camisetas mientras contemplaba el tema de este artículo: cómo aprovechar tus años universitarios para maximizar tus posibilidades de encontrar un buen empleo. Si quieres conseguir un buen empleo, debes aportar mucho más. Sigue leyendo y descubre cómo destacar.

Dolores Julián, responsable de marketing de la empresa de formación Avanzo, lo resume así: “Piensa que en el mundo de la empresa se valora el título en un primer momento, pero después, a los dos días, te valorarán por lo que sabes hacer.” Tus notas académicas serán importantes, sin duda, pero no van a ser el único criterio de selección para las empresas que te entrevistan. Y a veces ni siquiera el más importante. No habrá una mágica “nota de corte” que superándola te garantice el trabajo de tus sueños.

BONITO TÍTULO UNIVERSITARIO, PERO ¿QUÉ CUALIDADES TIENES?

¿Qué van entonces a mirar las empresas además de tus notas? Muchas cosas. Tu experiencia laboral,tu capacidad de comunicación (oral y escrita), cualidades personales como tu iniciativa y liderazgo, tu capacidad de trabajar en equipo, tu habilidad de aprender y adaptarte a nuevas situaciones, tu habilidad para tomar decisiones y resolver problemas, y tus capacidades organizativas por nombrar algunas. Valorarán también tu interés y compromiso personal con su negocio. Todas estas son capacidades básicas valoradas por cualquier empresa.

La buena noticia es que tienes 4 ó 5 años para potenciarlas, y los mismos estudios te proporcionan muchas oportunidades de desarrollar estas cualidades. Depende de ti buscarlas y aprovecharlas. Los trabajos en grupo, por ejemplo, son una excelente oportunidad para mejorar en muchas áreas: interacción en grupo, comunicación, coordinación, organización, liderazgo, etc. Sin embargo, no desestimes la importancia de tus actividades fuera de clase a la hora de diferenciarte de los demás.

NUNCA HE TRABAJADO PERO NO SE PREOCUPE, TENGO MUCHAS GANAS

Imagina al director de recursos humanos de una gran empresa. Cada mayo recibe una avalancha de curriculums de estudiantes a punto de licenciarse buscando trabajo. Coge dos al azar. Uno es de un estudiante con buenas notas que nunca ha trabajado en nada. El otro es el tuyo.

Quizás tu nota no es tan alta como la del otro, pero se ve en tu CV que has trabajado los veranos en una tienda de paintball, y que has participado en obras de teatro en tu facultad. ¿A quién va a elegir? Enhorabuena, acaban de llamarte para una entrevista.

La experiencia laboral tiene muchas formas, y es importantísimo a la hora de buscar trabajo. Deberías buscar oportunidades de conseguir experiencia laboral en cuanto entras en la universidad.

¿LLÚ ESPÍQUIN ÍNGLIS?

Todavía hay muchos estudiantes que terminan la Universidad sin dominar de verdad un segundo idioma. Y seguramente todos encuentran trabajo eventualmente.

¿Pero qué pasa una vez dentro de la empresa?

Las personas con idiomas tienen muchísimas más oportunidades que las personas que hablan sólo castellano. Hoy en día, hasta las empresas más pequeñas compiten muchas veces en el mercado internacional. Si tienes ambición, no dominar otros idiomas puede llegar a ser un lastre que deberás remediar.

Te resultará mucho más fácil aprender un segundo idioma o tercero (¿porqué parar si estás en racha...?), cuando estás aún en el colegio o en la universidad. Asegúrate de que el programa de estudio de la titulación que quieres estudiar te permite incluir un idioma aunque sea como asignatura optativa. Si no, tendrás que buscar clases fuera, aunque también puede ser una pista de que el plan de estudios no es tan actual como debiera.

Busca también oportunidades de practicar tus idiomas fuera de clase. Leer prensa de otros países en Internet, buscar amigos extranjeros, lo que haga falta. Estudiar un semestre o un año en otro país también es una forma excelente de consolidar tu dominio de un idioma. Si esta opción te atrae, no te olvides de preguntar por ella cuando estés hablando con universidades.

En fin, cuantos más idiomas hables, más vas a destacar del montón.

¡ESPECIALÍZATE!

Otra cosa que te ayudará a destacar sobremanera es poder demostrar que te has formado en el área específica en que quieres buscar trabajo, más allá del título que vas a estudiar.

Por ejemplo, imagina que vas a estudiar Marketing y que te gustaría trabajar en una multinacional de productos de moda como L’Oreal o Revlon. Otra vez veamos dos curriculums. El primero es de un alumno que dedicó todo su tiempo al estudio de marketing, y sacó matrícula de honor. El segundo currículo es el tuyo.

Tú tienes buenas notas, aunque quizá no tan buenas como el otro, pero es que estabas haciendo más cosas. ¿Qué cosas?

Primero, estabas aprendiendo francés e inglés. Francés porque las empresas donde más te gustaría trabajar son francesas, e inglés porque las empresas americanas también son fuertes en este sector. Además, te leíste todas las revistas de moda de manera religiosa para estar al día de las últimas tendencias. Intentaste por todos los modos asistir a las exposiciones de moda más importantes y aprovechaste para hacer preguntas a las personas que conociste en este mundillo.

En clase, siempre que te dieron un proyecto de investigación, si era posible lo hacías sobre algo relacionado con la moda. Hablaste con tus padres y te enteraste de que un amigo suyo es gerente de una tienda de Zara. Empezaste a fijarte en todas las campañas de Zara, y quedaste con él de vez en cuando para comentarlas, y preguntaste también por su visión del entorno competitivo del sector. Posiblemente le propusiste trabajar en la tienda a tiempo parcial, después de clase y fines de semana. Impresionado por tu entusiasmo y ganas de aprender, él aceptó. Te pagó un sueldo, pero lo habrías hecho gratis.

¿Estás captando la idea? Si tienes una buena idea ahora de lo que quieres hacer tras la universidad, busca todas las maneras de complementar tu educación con formación específica en el área de tu interés.

Si aprovechas tus años universitarios para hacer esto, y además aprendes idiomas y consigues experiencia laboral, las empresas lucharán entre ellas para contratarte. No es tan difícil, y hasta puede ser divertido. Ya verás. Lo importante es que nadie te dé una camiseta que diga, “4 años de estudio y lo único que me llevo es este puñetero título.”