¿Cómo se están adaptando las universidades a los cambios del mundo laboral?

Ante el nuevo panorama laboral, no sólo los estudiantes deben adaptarse, sino también las universidades y centros de estudios. Para saber cómo lo están haciendo, les hemos preguntado a sus responsables y estos son los cambios por los que están apostando.

Renovarse o morir

Diferentes estudios auguran que hasta el 85% de los empleos que habrá en 2030 no existen actualmente. Para Carmen Sebrango Sadia, responsable de Carreras Profesionales de la Universidad CEU San Pablo, “la volatilidad del mercado laboral y el ritmo vertiginoso al que cambian las exigencias de los empleadores nos obliga a estar preparados y actualizados para una nueva época profesional en la que surgen carreras y puestos para responder a necesidades del mercado laboral y de las empresas”.
En este sentido, la Universidad CEU San Pablo de Madrid ha creado nuevas titulaciones, especialmente en las ramas educativas relacionadas con la ingeniería, la salud o el mundo digital, donde los avances técnicos obligan a crear nuevos perfiles profesionales que cubran las plazas que demanda el mundo laboral. Así, destaca Carmen “contamos con el Grado en Genética, Grado en Ingeniería Biomédica, Grado en Inteligencia de Negocios -en colaboración con Telefónica-, Máster en Marketing Digital y Redes Sociales y el Título Propio en Realidad Virtual, en colaboración con SONY PlayStation”.

 

Mayor proximidad al mundo empresarial

La formación tiene que ayudarte a encontrar trabajo y la proximidad con las empresas es una apuesta clara por muchas instituciones educativas.

Este es el caso del Tecnocampus. Con sede en Mataró, representa un caso singular en el modelo universitario catalán: en sus instalaciones conviven tres centros universitarios adscritos a la Universitat Pompeu Fabra y 120 empresas vinculadas a la tecnología, el marketing o la salud. Gracias a ello, los más de 3.000 estudiantes de grado y posgrado del Tecnocampus comparten su día a día con el mundo de la empresa. Este ecosistema les ha permitido desarrollar iniciativas como el Weekend Challenge, donde durante todo un fin de semana los empresarios del parque aconsejan a aquellos estudiantes con ideas de negocio. Y es que el TecnoCampus tiene una clara apuesta por el emprendimiento, la innovación y la formación de calidad vinculada al tejido productivo. De hecho, dos de los últimos ganadores de los premios UPF Emprèn han sido estudiantes del Tecnocampus.

Las habilidades sociales también se aprenden

Si los conocimientos técnicos son importantes, la realidad laboral otorga una gran importancia a las habilidades sociales y comunicativas y esto se está reflejando en la misma oferta de estudios de las universidades. Por ejemplo, la Universidad Pontificia Comillas ICAI-ICADE ofrece un Diploma de Habilidades Personales adaptado a las necesidades de los estudiantes de cada una de sus titulaciones. Los alumnos aprenden habilidades como hablar en público, usar el tiempo de forma eficiente, negociar o trabajar en equipo.

Virginia Tolín Hernani, directora de la Oficina de Marketing Institucional de Comillas, recomienda a los estudiantes “priorizar aquellas universidades que se vuelquen en innovación educativa, internacionalización, educación integral y empleabilidad. Elegir una universidad innovadora, que dé posibilidades de internacionalización a sus alumnos y que tenga relaciones estables con el mundo empresarial para garantizar altos niveles de empleo y conocimiento de nuevas necesidades laborales, podrá garantizar un futuro brillante”.

Innovación en la oferta educativa

Cada año actualizamos la oferta completa de grados en España que publicamos en yaq.es y en la edición de “Todos los Grados” que publicamos en mayo. Y cada año, hay una cantidad de nuevas titulaciones que se crean y otras muchas que pasan a cerrarse por no tener la acogida esperada.

Precisamente, desde la Universidad Isabel I destacan la necesidad de actualizar la oferta como respuesta a las necesidades de un mercado laboral en constante transformación, que exige nuevos perfiles profesionales para cubrir puestos muy específicos.

Este curso 2018/2019, esta universidad ha lanzado nuevos másteres oficiales en Ciberseguridad, en Análisis Inteligente de Datos Masivos (Big Data) y en Dirección y Gestión de Proyectos. “Estos tres títulos tienen un eminente carácter práctico y capacitan a los alumnos en tres de los ámbitos donde existen mayores necesidades de personal en las empresas”, nos apunta Pilar Conde, vicerrectora de Ordenación Académica de la Universidad Isabel I.

“En ciberseguridad, sólo en Europa se calcula que para 2020 habrá cerca de 350.000 puestos de trabajo sin cubrir por falta de profesionales formados en este área. La explicación de la creciente demanda de perfiles expertos también radica en el aumento de amenazas existente, como el reciente caso WannaCry, que afectó a industrias de todo el mundo infectando más de 230.000 equipos de 150 países en apenas 48 horas”, destaca Pilar Conde.

Precisamente, el Big Data es otro campo hacia el que las compañías están enfocando sus necesidades de personal. Pilar nos comenta “como ejemplo, en los dos últimos años se han generado más datos que en el resto de la historia, y apenas se procesa y se analiza un 0,5% del total. Las posibilidades de este sector alcanzan a todas las actividades económicas, y su recogida, estudio y aplicación de soluciones a partir de los resultados obtenidos permite optimizar tanto los recursos como su rendimiento”.

Especialización

Otra tendencia que se aprecia en el mercado educativo es el surgimiento de nuevos centros con una oferta educativa muy especializada y enfocada a las necesidades del mercado laboral. Un ejemplo es U-tad, un centro universitario lanzado en 2011 y adscrito a la Universidad Camilo José Cela.

José Antonio Rodríguez, director académico de U-tad, explica que “desde nuestro nacimiento, hemos apostado por una formación universitaria totalmente diferencial y especializada en las nuevas profesiones que la industria digital demanda”.

Remarca que “todos los estudios indican que profesionales con habilidades tecnológicas y digitales son los que más escasean, por eso en U-tad apostamos por áreas como la Ingeniería del Software, el Diseño Digital, el Diseño de Videojuegos y de la Animación”.

También en U-tad revisan constantemente su oferta educativa. “Nuestros planes académicos se revisan todos los años para adaptarnos a las necesidades y demandas de las empresas”.

Trabajo sobre proyectos reales

Aunque la universidad en general se ha caracterizado por un enfoque muy teórico, cada vez son más conscientes de la necesidad de conectar su formación con el mundo laboral. En el caso de U-tad, destaca José Antonio Rodríguez, “nuestro método y nuestro éxito se basa en que los alumnos aprenden sobre proyectos reales, estando en contacto permanente con el tejido industrial y realizando trabajos multidisciplinares teniéndose que entender alumnos de distintos perfiles y habilidades”.

Orientación al empleo

Todas las universidades y centros de estudios son conscientes de la importancia de orientar para el empleo a sus alumnos, así que cuentan con departamentos dedicados a este fin.

Juan Manuel de Lara, responsable del Departamento de Orientación Profesional de IEB, centro adscrito a la Universidad Complutense de Madrid, destaca el reto que enfrenta a los centros:

“La cuestión es: ¿cómo se puede orientar a un estudiante en su carrera profesional cuando la empleabilidad, e incluso la propia definición de empleo, se ha transformado totalmente? Ya casi no existen los puestos de trabajo vitalicios. Trabajar en una empresa sin necesidad de ir a una oficina es cada vez más frecuente. Muchos puestos de trabajo los ocuparán robots. Y muchos procesos de selección de candidatos se apoyan en complejos algoritmos. Todos estos cambios están transformando el concepto de la empleabilidad”.

Para adaptarse a este nuevo entorno, en IEB están digitalizando todos los procesos y funcionalidades del área de Orientación Profesional e implementando un programa de actividades que facilite a las empresas reclutar talento y a sus alumnos su proyección profesional.

Desde la Universidad del Atlántico Medio, para garantizar el empleo a sus alumnos, además de dar los conocimientos adecuados para realizar el trabajo, hacen especial hincapié “en una formación humanista integral, con fuerte acento en las virtudes de esfuerzo, competencias en comunicación, colaboración en los equipos, iniciativa e innovación y deseo de servir a la sociedad desde la ética”, nos comenta su rector, José Ramón Pin Arboledas. Esto sin olvidar, “la inmersión en nuevas tecnologías, instrumento esencial en el mundo global de innovación para el que preparamos a nuestros alumnos”, añade Pin Arboledas.

 

 

Cuantas más prácticas, mejor

Las prácticas y clases con casos reales son fundamentales para el aprendizaje real. Así lo considera Manuel Aguilera, profesor de Periodismo en el Centro de Enseñanza Superior Alberta Giménez (CESAG), adscrito a la Universidad Pontificia Comillas ICAI-ICADE, en Palma de Mallorca. “Nuestros alumnos realizan prácticas como mínimo dos cursos y eso les permite entrar antes en el mercado laboral”.  

Para ello, destaca que la mayoría de sus docentes, además de ser doctores, siguen vinculados al mercado laboral.  Además, “los contenidos en las asignaturas de Educación Infantil y Educación Primaria se basan en estudios de caso, simulaciones, aprendizaje basado en problemas y proyectos”.

Nadie duda de que las prácticas son esenciales para adquirir experiencia real del mundo del trabajo. Para que los estudiantes puedan sacar buen provecho, desde la Universidad Complutense de Madrid destacan la importancia de hacer un seguimiento exhaustivo de las mismas y así “garantizar que estén ligadas a la titulación y que sean sobre todo formativas y de calidad”.

Foros y actividades para conectar con el empleo

Es normal que la mayoría de universidades realicen actividades para acercar sus estudiantes al mercado laboral. La Universidad Complutense de Madrid, por ejemplo, organiza foros de empleo sectoriales –en donde los estudiantes interactúan con las empresas de su sector de forma directa– o desayunos de trabajo que reúnen a representantes de empresas e instituciones con los decanos, para abordar las necesidades mutuas en materia de prácticas y empleo.

De hecho, la Complutense tiene también un Plan de Formación para el Empleo que, a través de cursos cortos (Claves para el empleo) y de otros más largos (Programa de desarrollo profesional), oferta formación gratuita a los estudiantes en competencias, habilidades y técnicas que les permiten insertarse en el mundo laboral.

Conocimientos múltiples y equipos multidisciplinares

Aunque el nuevo mercado laboral demanda especialización, los grandes retos empresariales y de nuestra sociedad no los puede resolver una única persona. De ahí la importancia de conocer un tema muy a fondo, pero también saber conectarlo con otras disciplinas.

Así lo valora Anna Pujadas, directora de EINA, Centro Universitario de Diseño y Arte de Barcelona, adscrito a la Universitat Auònoma de Barcelona, que imparte el Grado en Diseño. “Hoy, los límites entre las disciplinas de diseño son más fluidos, gracias al intercambio de herramientas y conocimientos digitales avanzados. El proceso de diseño asume cada vez una mayor complejidad, por eso los diseñadores necesitan redefinir su rol y propósito para un contexto de medios expandido dominado por un modo de conversación de múltiples agentes. Hay un aumento de la complejidad, la conectividad y la velocidad de transformación de la sociedad que requiere contextualizar más el diseño, se requieren habilidades y comportamientos orientados más a las personas”, nos cuenta.

Programas para emprender

Trabajar para uno mismo será mucho más frecuente y las universidades quieren ayudar a sus alumnos a tener éxito en ello. Por eso, actualmente, las opciones que la universidad te ofrece para adentrarte en el mundo emprendedor son casi infinitas.

Un reflejo de ello es la Universidad de Extremadura, que cuenta con numerosos servicios y programas para promover el emprendimiento, nos informa José María Conejero, su vicerrector de Estudiantes y Empleo. Como Sapiem, que apoya la iniciativa emprendedora desde su concepción hasta su puesta en marcha, a través de formación en habilidades emprendedoras y asesoramiento de expertos; Explorer, un programa colaborativo de formación y acompañamiento, promovido por el Banco Santander, de 5 meses de duración, dirigido a jóvenes con talento entre 18 y 30 años, para ayudar a desarrollar sus ideas innovadoras de base tecnológica; o cursos de perfeccionamiento en habilidades emprendedoras; entre otros.

 

Enfoque internacional y global

El nuevo escenario laboral cambia cada día y está demandando profesionales que sean capaces de adaptarse a este entorno. Amparo Galbis, rectora de la Universidad Europea de Valencia, comenta que son muy conscientes de esta situación y, por ello, “apostamos por una formación innovadora, integral y de calidad”.

En su universidad priorizan “la vertiente internacional, la multiculturalidad y la formación en habilidades y competencias profesionales; porque somos muy conscientes de que vivimos en un mundo cambiante, en constante transformación y que reclama líderes comprometidos con su entorno” destaca Amparo Galbis.

Además, “como respuesta a la globalización, nuestro modelo educativo ofrece una visión integral y abierta al mundo, orientada a que el estudiante pueda desenvolverse con éxito en el entorno laboral de cualquier país del mundo. Gracias a nuestro carácter internacional, contamos con profesores y estudiantes de más de 60 nacionalidades, titulaciones bilingües, la garantía de estancias en muy diversas universidades extranjeras o prácticas internacionales”.

Formación para toda la vida

Una tendencia de la enseñanza superior es que hay que estar reciclándose a lo largo de toda la vida. Por eso, algo que no todo el mundo sabe es que entre la oferta educativa de las universidades es normal encontrar cursos cada vez más cortos y de especialización.

Ese es el caso de la Universidad Complutense de Madrid, que organiza cursos de formación permanente de distinta duración y modalidad: 115 másteres propios, 26 títulos de especialistas, 30 de expertos y 73 diplomas y certificados.

Esta oferta formativa permite complementar las enseñanzas oficiales o abordar la necesidad del aprendizaje a lo largo de la vida y proporciona a los trabajadores en activo y a los desempleados la preparación precisa para afrontar mejor el mercado de trabajo cambiante en el que nos encontramos”, destacan desde su Gabinete de Comunicación.

Está claro que la universidad está moviendo ficha para adaptarse al nuevo mercado laboral y tú debes escoger la que mejor encaje contigo.

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